”Adicción al Blanqueamiento”

El color obtenido después de un blanqueamiento no puede ser más blanco que el color ( tono ) del cristal del esmalte que se tenga y eso varía entre persona y persona.  Algunos los tendrán mas blancos, otros más grises y otros mas amarillentos. Así como no se puede cambiar el color de una piedra como el rubí, no se puede cambiar el color del cristal del esmalte. El blanqueamiento solo remueve los pigmentos que hay entre los cristales y el resultado que da es un color mas claro que el que tenías al empezar hasta llegar a un punto límite de blancura que es el color del cristal puro como el que tenían tus dientes cuando salieron en boca a partir de los 6 años y estaban “nuevitos”.

Ignorar esto puede llevar a conductas erráticas como esta adicción. Algunas personas al ver que el tono obtenido no satisface sus expectativas se hacen otro blanqueamiento más y más y así reiteradas veces en un corto período de tiempo ( días o semanas )  para intentar resolver su frustración.

Si estas personas hubieran estado correctamente  informadas desde un comienzo seguramente habría menos casos de blancorexia.

Es el dentista al que tienen que acudir sin dudar cuando se tiene una inquietud sobre algún tratamiento dental, inclusive los puramente estéticos como es el caso.

Daños:

Necrosis Pulpar: El uso reiterado y descontrolado ( sin tutela profesional ) de blanqueadores con base de Peróxidos ( Peróxido de Hidrógeno o Peróxido de Carbamida ) pueden provocar desde una leve sensibilidad dental hasta una necrosis pulpar ( muerte del tejido que está dentro del diente ). Si no se trata a tiempo una necrosis de este tipo se corre riesgo incluso de perder la pieza.

Desmineralización: Al mismo tiempo, si sabemos que los peróxidos oxidan  y por tal liberan protones de hidrógeno ( H+), el gel blanqueador se volverá mas ácido con el correr de los minutos dañando y debilitando los cristales del esmalte. Es decir, un gel blanqueador con base de peróxidos mal utilizado puede dañar tu esmalte dental.

Gingivitis: Si estos geles con peróxidos actúan directamente sobre la encía, pueden provocar daños desencadenando en una inflamación de la gíngiva ( gingivitis ).

Entonces vemos que el uso de geles con base de peróxidos conlleva importantes riesgos y la nueva legislación de la Unión Europea prohíbe su uso si no hay un profesional que controle su aplicación en todo el proceso. En el continente Americano, las leyes son mas permisivas y permiten el uso sin tutela profesional solo debajo de ciertas concentraciones ( varía según el país ) aunque por más que las leyes lo permitan allí, cuando se usa geles con base de peróxido lo mejor es estar asesorado profesionalmente.

Daño Ocular: Se usan habitualmente lámparas blanqueadoras que pretenden acelerar el efecto del gel y por ende acortar el tiempo que dura el blanqueamiento. Según el tipo de blanqueador, algunas lámparas irradian una luz tan fuerte que es necesario usar protección ocular ( gafas protectoras ). Una blancorexia eleva el riesgo de un daño ocular si no se usa la protección adecuada con este tipo de lámparas.

Así que la Blancorexia además de ser un trastorno psicológico, conlleva riesgo físico.

¿Cepillo eléctrico o manual? Esa es la pregunta que se hace mucha gente a la hora deelegir el cepillo de dientes más adecuado. Aunque la mejor respuesta siempre la tendrá tu dentista, aquí van las ventajas de los dos tipos de cepillo de dientes.

 CEPILLO MANUAL

El precio del cepillo manual y su fácil transporte pueden que sean los mayores atractivos para su uso. Con este tipo de cepillos notamos la presión que ejercemos sobre los dientes. Una fuerza excesiva puede desgastar el esmalte, causar dolor, sensibilidad o retracción de encías.

 CEPILLO ELÉCTRICO

Una de las mayores ventajas del cepillo de dientes eléctrico es que, debido su pequeño cabezal y a su longitud, se puede acceder mejor a las zonas complicadas de la boca. Algunos de estos cepillos incluyen un sensor de presión, que indica si cepillamos con demasiada fuerza, o temporizador, para saber el tiempo de cepillado de cada zona. El cepillo de dientes eléctrico más recomendable es el que tiene un movimiento de rotación-oscilación, es decir, en el que las cerdas giran juntas en una dirección y luego rotan en la dirección contraria. Este tipo de cepillo de dientes está aconsejado para personas que les cuesta mover los hombros, brazos o manos.

Sea cual sea el cepillo que uses, debes saber que este debe cambiarse cada 2-3 meses o cuando las cerdas estén desgastadas y que el tiempo de cepillado debe durar unos dos minutos. Para saber qué cepillo es el más adecuado para ti no dudes en acudir a SDS Centro Dental  donde nuestro equipo de profesionales valorará el más conveniente para tus características bucales.

NO TODOS LOS IMPLANTES DENTALES SON IGUALES

En implantología, la calidad y la fiabilidad de los materiales que nos colocan en boca tienen una repercusión directa sobre la calidad y los resultados del tratamiento efectuado.
Hay que saber que en la actualidad existen más de 200 tipos de implantes, sin embargo sólo unos pocos disponen del aval científico que acredite la máxima calidad y fiabilidad de la intervención.

Con el objetivo de abaratar costes, ciertas clínicas deciden rebajar la calidad de los implantes, lo cual tiene una repercusión sobre el precio del tratamiento pero también sobre los resultados y la fiabilidad del mismo. A pesar de que se la intente banalizarla como un mero producto de consumo, nunca debemos perder de vista que la implantología es una especialidad ante todo relacionada con la salud, y que como tal, las consecuencias de una mala intervención pueden llegar a ser graves y dolorosas.

¿QUE SUELEN ESCONDER LAS OFERTAS DE IMPLANTES LOW-COST?

En cualquier sector de actividad, sabemos que la calidad siempre tiene un precio, por esta razón en odontología, las “gangas” suelen por regla general esconder:

–   El uso de materiales de dudosa calidad o de procedencia indefinida, lo cual tiene una incidencia sobre las probabilidades de éxito y la garantía del tratamiento y puede dificultar la búsqueda de soluciones en casos de alergias o de otras patologías.

–    La omisión de ciertas fases del diagnóstico o del mantenimiento futuro, ambos imprescindibles para minimizar los riesgos del tratamiento y garantizar un seguimiento.

–   Ofertas engañosas. Práctica empleada por ciertas entidades, que viene siendo denunciado por el consejo de dentistas, y que consiste en realizar ofertas que no se adaptan a la realidad del coste final del tratamiento, por la suma de “añadidos” durante el proceso y por lo cual el precio acaba siendo mucho más elevado.

¿CÓMO EVITAR PROBLEMAS O SORPRESAS?

–  Exija un certificado de calidad y la tarjeta identificativa necesaria para conocer la procedencia del implante, así como los materiales con los que ha sido elaborado. Estos documentos, no solo ejercerán de garantía frente a cualquier problema post tratmeinto, sino que también facilitará el seguimiento en caso de cambio de cambio de residencia o de dentista. Sólo la trazabilidad de los materiales nos indicará si son de máxima calidad y fiabilidad.

–    Asegúrate que el estudio implantológico y el seguimiento “post tratamiento” están incluidos en la oferta, ya que estos no se deberían disociar de la intervención

–   Solicita un presupuesto detallado del tratamiento completo y no olvides que un implante consta no solo de la raíz artificial sino obviamente de la corona sobre implante, cosa que ciertas entidades obvian comunicar en su publicidad.